empezó a estudiar para delineante de arquitectura, momento clave para su trayectoria posterior, ya que entra en contacto con el mundo artístico en el estudio del arquitecto gijonés Antonio Álvarez Hevia, donde se preparaba para delineante junto a Joaquín Rubio Camín.

Entre 1945 y 1948 Suárez expande su actividad pictórica, rodeándose de artistas, experimentando con diversas técnicas y materiales, hasta que tiene los primeros contactos con una “pintura distinta”, principalmente el impresionismo y el surrealismo.

Animado por Nicanor Piñole y Evaristo Valle, organiza en 1948 junto a Camín el primer Salón de Navidad de Gijón. Se traslada a Madrid donde expone en la sala Buchholz en 1950, y es ahí donde comienzan sus primeras pinturas abstractas. Un año después viajará a París, que supondrá un punto determinante en su posterior trayectoria.

En 1954 se instala en Madrid, contactando con artistas e intelectuales entre los que se encuentran los pintores junto a los que tres años después fundaría el mítico grupo El Paso, integrado por autores de la talla de Antonio Saura, Manolo Millares o Luis Feito.

Artista asturiano de fama internacional, su obra está presente en el Museo de Bellas Artes de Asturias, en el Reina Sofía, el Museo de Arte Contemporáneo de Barcelona, El de Bellas Artes de Sevilla o el de Bilbao, así como el de San Francisco o Leverkusen.

Autor prolífico, desarrolló su talento artístico especialmente a través del lienzo, la obra sobre papel y la obra gráfica, con especial inclinación por el grabado.